lunes, 8 de junio de 2020

TOUR por las calles de MADRID Desde EL SEGUNDO PISO de un bus parte 2





Esta arteria del comercio madrileño se prolonga desde la plaza de la Independencia y llega hasta la plaza de la República de Ecuador. Y durante todo ese trayecto va en paralelo a otras grandes avenidas como la Castellana o el Paseo Recoletos, o cruza en perpendicular otras también importantes, como la calle de María de Molina o la dedicada a Joaquín Costa.

Plaza de la Republica de Argentina cruzando la calle de Joaquin Costa

Serrano, el amante de Isabel II que dio nombre a la calle más comercial de Madrid

Logró seducir a Isabel II hasta convertise en su favorito. Un romance que estuvo a punto de provocar una crisis institucional. Narváez resolvió el entuerto en 1848, cuando el gobierno de Joaquín Francisco Pacheco reconcilió a la reina con su esposo y desplazó a Serrano, designándolo capitán general de Granada.

El general Serrano residió en ella cuando aún se llamaba Bulevar Narváez. José María de Salamanca y Mayol, el marqués que daría nombre al barrio, quiso dejar la impronta del París de su exilio, con los bulevares y las anchas avenidas que todavía predominan en la calle Serrano. Con un pie en Claudio Coello y otro en Villanueva empezó a levantar esta vía donde en 1863 comenzaron a erigirse las primeras casas, incluso con agua corriente, un lujo en esos días.

En la esquina con la calle de Maldonado, se levantó la primera estación de tranvías de la ciudad, desde la que el 31 de mayo de 1871 partía el primer convoy. En Serrano se construyeron los mejores comercios de la época en los que compraban los vecinos ilustres del barrio: Ríos Rosas, Fernández de la Hoz, Alonso Martínez, Castelar, Cánovas del Castillo, Lázaro Galdiano, Pérez Galdós.

Incluso, estuvo uno de los establecimientos más curiosos del momento, el Teatro Ventura, el nombre de la hija general Serrano. La Duquesa, cuando por fin recuperó el ánimo tras la muerte de su marido en 1885, decidió levantar en un edificio de su propiedad en la calle de Villanueva esquina a la de Serrano.

Esquina con la calle del General Orá se encontraba también la «huerta de Cánovas» que, durante la Guerra Civil Española fue sede del Partido Comunista. En Serrano estuvo, donde hoy se encuentran los Jardines del Descubrimiento, la antigua Casa de la Moneda. Allí se emplazó la sede este diario durante casi un siglo.

Esta calle también es conocida por sus boutiques de moda, como Tommy Hilfiger, Carolina Herrera, Manolo Blahnik, Prada, Ermenegildo Zegna, Gucci y Salvatore Ferragamo, entre otras; también se hallan joyerías internacionales como Cartier, Tous, Bvlgari, Piaget, entre otras.

La Puerta de Alcalá que se encuentra en la Plaza de la Independencia junto a la Fuente de Cibeles y el Parque del Retiro.

De estilo neoclásico, similar a los Arcos de Triunfos romanos, ha sido restaurada en cinco ocasiones y es uno de los monumentos más representativos de Madrid.

Giramos por la calle de Alcalá una de las principales arterias de Madrid, tanto en tráfico como en actividad comercial.

Una calle con mucha historia (comenzó a construirse en el siglo XV)  ha visto pasar ante sí el progreso y la transformación de la ciudad, así como hechos históricos de calado, es la calle más larga de Madrid y la tercera de España.

La Plaza de Cibeles es la plaza más famosa de Madrid. Está presidida por una hermosa fuente y flanqueada por imponentes y representativos edificios construidos entre finales del siglo XVIII y principios del XX.

Al frente el edificio Metrópolis y a su derecha la Gran Vía continuamos por la calle de Alcalá

La calle termina su recorrido "céntrico" cruzando la M-30, el primer anillo circunvalador de Madrid, a la altura de la famosa plaza de toros de Las Ventas.



Esta es su zona más turística y monumental. La actividad comercial se centra en su tramo inicial, en la confluencia con la calle Goya en la plaza del mismo nombre y con Doctor Esquerdo en la Plaza de Manuel Becerra.



La Calle de Alcalá es una de las más antiguas de Madrid. Su nacimiento, acorde con el Madrid de la época, fue espontáneo, ya que el Madrid de la Edad Moderna se caracterizó por la falta de toda planificación urbanística.



Su trazado surge a comienzos del siglo XV de un antiguo camino que nacía del entonces limite occidental de Madrid, la Puerta del Sol. La calzada conducía hacia el este, a Alcalá de Henares y hasta Aragón. Inicialmente recibió el nombre de calle de los Olivares, debido al olivar que atravesaba y por el que se veía flanqueada.



Cuando la reina Isabel la Católica mandó talar el olivar aledaño, debido a la cantidad de malhechores que se escondían en ellos, la calle perdió su anterior denominación.



A medida que la población de la ciudad crecía, y especialmente a raíz del nombramiento de Madrid como capital de España en el siglo XVI, sus aceras se fueron poblando de mansiones de la aristocracia y de conventos, convirtiendo el antiguo camino en parte de la ciudad.



Carrera de San Jeronimo pasando por la Plaza de Canalejas ésta plaza se encuentra situada a mitad de camino entre la Puerta del Sol y la Plaza de Neptuno. También fue conocida como la Plaza de las Cuatro Calles por las que las atravesaban. Su nombre proviene del del político José Canalejas, fallecido en 1.912 por un atentado en la Puerta del Sol. Está rodeada de edificios de un estilo clásico adecuado a la época de su construcción.